Sustratos

Los sustratos son materiales orgánicos utilizados en muchos tipos de cultivo. Los sustratos proporcionan nutrientes a las plantas y mantienen las raíces, a través de sus compuestos orgánicos. Una propiedad importante de este tipo de suelos es que tienen una mejor capacidad para retener agua y nutrientes, los cuales posteriormente liberan lentamente, mejorando así las condiciones para el crecimiento de las plantas.

Dependiendo del tipo de planta o flor que estés cultivando, puedes utilizar los sustratos de forma diferente, creando distintas composiciones, dando como resultado un nivel de pH diferente o una modulación de muchas otras características. Según la necesidad de la planta y el material orgánico que contenga, cada sustrato puede proporcionar la cantidad necesaria de nutrientes, agua y flujo de aire, creando un mejor ambiente de germinación de semillas o pudiendo reducir significativamente el riesgo de pudrición de las raíces, entre muchas otras opciones adaptándose a las necesidades del cultivo.

Por ello hay dos sustratos principales: los sustratos de flores, que proporcionan suficiente agua sin dañar la flor; y los que se usan para cultivos, que proporcionan un ambiente saludable donde los cultivos puedan desarrollarse fácilmente a a medida que el suelo se vuelve más fértil.